miércoles, 12 de noviembre de 2008

Haiku

Palabras en el olvido
Interminable fábrica de insatisfacciones
Chinga tu madre


¡Agüebo!

viernes, 7 de noviembre de 2008

Reata de película

La carrera de la muerte
Calificación: Eyaculadora


Antes de que empezara esta pinche peliculita culera yo ya había eyaculado como seis veces en mi butaca y nomás de ver en los cortos que el próximo año sale la nueva de Rápido y Furioso… ¡agüebo! …soy un pinche naco de proporciones bíblicas y qué pedo.

Y como el gato asqueroso de altos vuelos, siete suelas, cinco estrellas y gran turismo que soy, me gustan las películas en las que salen carros corriendo bien recio y rete hartas viejas acá buenonas, el argumento vale madres con tal de que se vean motores y chichis ¡agüebo!

La carrera de la muerte en realidad es un refrito de una chaquetez setentera (pero muy de culto) que se llamaba Death Race 2000 donde salían David Carradine (Bill en Kill Bill) y Sylvester Stallone (chingue a su madre el que no sepa quién es este güey), la cual se trataba de un rally futurista entre pinches pederastas, algo así como lo que hicieron el Coque Muñíz y Leonardo García en Los Hermanos Buenaonda pero el lugar de mudanceros aquí eran criminales (¡saca la puta referencia cabrón!).

En fin, el pedo es que en un futuro no muy lejano lo más ganador y acá son las carreras extremas entre prisioneros de alta peligrosidad transmitidas por internet. O sea, te conectas a tu compu y pagas una lana para que desde una cárcel privada (ay sí maldito capitalismo, maldito neoliberalismo… ¡güebos pinches comunistas de mierda!) te manden la señal donde puedes ver a varios culeros a bordo de unas máquinas fuertemente blindadas y armadas correr y darse en la madre para ganar su libertad; aquel cabrón que sobreviva y gane cinco carreras gana su libertad, de eso se trata.

Lo más cabrón, y aquí viene la séptima eyaculada, esque a la nueva versión de esta historia le adaptaron lo que muchos tarados como yo hemos pedido a gritos y mentadas de madre: un sistema de competición basado en videojuegos como Mario Kart o Crash Team Racing, es decir, que vas manejando y pasas por unas madres y activas tus armas, pero en lugar de aventar cáscaras de plátano o caparazones de tortuga, aquí tienes chance de ametrallar al cabrón de enfrente o dejarle ir napalm al güey de atrás… ¡Uts!

Pus’ resulta que entamban a un ex piloto de carreras y lo trepan a un Mustang blindado (la octava) para que corra bajo el nombre de Frankenstein, quien es el vato más aclamado por los usuarios. Entonces se agarra contra un cabrón que se llama Ametralladora Joe, quien es interpretado por Tyrese Gibson, quien a su vez era el negro de Más Rápido y Más Furioso (la novena).

Y por si no fuera poco, en la competencia los reos utilizan como copilotos a unos bizcochitos de nomames salidos de la penitenciaría femenil, nomás para ponerle nalga al asunto (y ahí la décima), y ya las escenas de explosiones, plomazos, sangre, choques y demás son un regalo de Dios.

Y con esto, le agrego un nuevo nivel adjetivesco al español: “Eyaculadora” es más que simplemente “Ganadora”. Real Academia de la Lengua, ponte chingona porque estos días ando muy cabrón con el vocabulario.

FICHA TECNICA:
Dirigida por: Paul W.S. Anderson
Con: Jason Statham, Tyrese Gibson, Ian McShane, Natalie Martinez, Joan Allen, Jacob Vargas, Jason Clarke, Max Ryan
País: Estados Unidos
Año: 2008



P.D. Esta entrada va dedicada a la memoria del Licenciado Mouriño Terrazo, estás en nuestros corazones carnalito, chido, tú sí eras banda

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Recordando viejos amores

¡Güey! O sea no mames, lo vi y chillé nomás de acordarme que ante todo... soy un ser humano, uno bien enfermo y últimamente muy tirado a la chingada, pero ser humano al fin.

domingo, 2 de noviembre de 2008

Estado de ánimo

Nada como una rola del príncipe para explicar el porqué todo el mundo tiene que irse a chingar a su madre